martes, 18 de enero de 2011

Nuestra relación con el arquitecto


Un arquitecto es la primera persona con la cual hemos de contactar. Los haya buenos o muy buenos y esto no depende de su fama o prestigio, ni del volumen de proyectos de su gabinete. Para mi el mejor arquitecto es en quien yo puedo confiar, ha captado mi idea y la ha convertido en un proyecto ejecutable con mi supervisión constante.

El va ha ser quien diseñe nuestra casa. El va a ser quien, en gran medida, oriente nuestras acciones cotidianas convirtiéndolas en nuestro modo de vivir.

Para explicarme mejor os diré que, una vez la casa esté acabada y por poner un ejemplo para ir desde el salón al comedor haya que dar tres pasos, media vuelta y dos pasos más, toda la vida que viváis en esa casa tendréis que hacerlo, a no ser que eso os incomode y hagáis reformas. Otro ejemplo es la distribución de la cocina a la hora de guisar, de preparar los platos, desayunar en la cocina, etc. Los lavabos son un lujo pero en horas punta son cruciales., La distribución interior va a determinar vuestra futura relación entre los miembros de familia.
En el diseño de la casa hay dos partes principales y muy importantes; El diseño exterior y el diseño interior.

Lamentablemente, hay ciertos arquitectos, incluso de renombre que se preocupan más de la fachada del edificio que de sus prestaciones en cuanto a movilidad por el interior del espacio. Ellos piensan en sus logros.

El mejor arquitecto es aquel a quién le exponéis de una manera coherente vuestra idea. Incluso aunque no sea al principio muy coherente, él ha de saber buscar esa coherencia de entre vuestro amasijo de ideas. Vuestras ideas son las importantes y se han de configurar correctamente para que el proyecto final sea un espacio familiar vital. 

Las casas, como todo en esta vida, cansan, y otras veces son excesivamente cansinas, no descansamos bien, tenemos problemas porque las escaleras no están bien diseñadas, una escalera que no contemple unas proporciones estándares que todos los arquitectos conocen se puede convertir en algo tan peligroso como una rotura de cadera, una pierna o incluso la espalda.

Muchas veces ocurre, que las escaleras no caben bien en nuestro espacio interior y la tendencia actual es meter la escalera donde quepa y a cualquier precio.
Con el arquitecto vamos a exponer lo que nosotros queremos, nuestra idea. Vamos a explicarle ( y sobre todo que tome apuntes) como vivimos y como nos relacionamos en nuestro entorno familiar. Vamos a explicarle que es lo que necesitamos. Vamos a llevarle unas cuantas fotos de fachadas de casa que nos han gustado, de revistas, etc. Cuanto más información tenga el arquitecto de vosotros y de vuestro modo de vivir, mejor os adaptareis a vuestro hogar una vez felizmente acabado.

Primero analizad el entorno donde está situada la parcela o casa a restaurar. Mirad a vuestro alrededor, a las casas de los vecinos, a los campos, a vuestro entorno, imaginaos la casa de vuestro sueño acabada en aquel lugar. No es tarea fácil, pero os habéis metido en una gran empresa y tendréis que fomentar vuestra imaginación al máximo.

Como resumen, os digo, que un arquitecto ha de ser para vosotros más que la relación que podáis tener con vuestro médico. El arquitecto va a construir vuestra futura vida familiar. El va a hacer posible ese proyecto, con vuestra ilusión y ayuda. Nada más.


1 comentario:

Cristian Álvarez Blanco dijo...

Muy interesante lo que dices! Estoy de acuerdo, los arquitectos estamos al servicio de la gente y nuestra labor es ofreceros los conocimientos para llevar a cabo vuestras ideas.

Un saludo
Cristian
http://construcciondecasasdemadera.blogspot.com.es/